20 de Julio de 2009, cómo olvidar ese día, domingo, cuando desde las 11 de la noche de un día antes diste muestra de que querías venir, fue hasta las 8:10 de la mañana del lunes cuando abrieron tus ojos, esos ojos grandes con que ahora ves el mundo, ese mundo tan distinto al que vemos nosotros, tus padres.